El Directorio Ejecutivo del Banco Interamericano de Desarrollo aprobó hoy el primer financiamiento del sector privado para un proyecto de biocombustibles en Brasil por un total de US$120 millones a Usina Moema Açúcar e Álcool Ltda. con sede en São Paulo. Moema es un importante productor de azúcar, etanol y bioenergía, operando en una de las industrias de más rápido crecimiento en Brasil y en el mundo.
Esta operación forma parte de una iniciativa del BID para promover la estructuración de financiamiento de deuda prioritaria para cinco proyectos de producción de etanol en Brasil que tendrán un costo total de US$997 millones. Estas inversiones contribuirán al objetivo de Brasil de triplicar su producción anual de etanol para el año 2020.
El BID también apoya el objetivo del gobierno brasileño de convertir a su país en un centro mundial de primer nivel para investigación y desarrollo de biocombustibles. El Banco viene sosteniendo conversaciones con las principales autoridades de Brasil para facilitar la transferencia de tecnología y asistencia técnica y permitir que otros países de la región se puedan beneficiar del conocimiento y la experiencia de Brasil en este campo.
“En años anteriores, el vigoroso crecimiento de Moema se financió principalmente mediante deuda a corto y mediano plazo”, afirmó uno de los jefes del equipo del BID, Leandro Alves. “Actualmente, Moema ha iniciado un proceso de refinanciamiento de esa deuda hasta un monto de US$120 millones, a través de un paquete de financiamiento preparado por el BID”, añadió.
El paquete comprende un préstamo del BID de hasta US$40 millones del capital ordinario del Banco y un cofinanciamiento de hasta US$80 millones proveniente de bancos comerciales.
“La transacción ayudará a Moema a extender de 10 meses a 6,6 años el promedio de vida de la deuda refinanciada”, explicó otra jefa del equipo del BID, Sylvia Larrea. “Esto permitirá mejorar el perfil de la deuda de la compañía, haciéndolo más acorde con las características de largo plazo de sus activos básicos, mejorando la sostenibiliad de la empresa”, añadió Larrea.
La operación permitirá a Moema reorientar fondos que actualmente usa para atender el servicio de su deuda a corto plazo, para financiar su plan de inversiones de capital, incluidos proyectos tendientes a impulsar la producción de azúcar, de etanol y la cogeneración de energía a partir de biomasa (bagazo).
La ventanilla del sector privado del BID sirve de catalizador, facilitando no sólo los financiamientos de largo plazo que requiere Moema, sino también la movilización de fondos privados en forma de cofinanciamiento. La condición de implementar el Sistema de Gestión Ambiental y Social del BID asegura el buen manejo de los potenciales impactos ambientales, sociales, laborales y de salud.