Préstamo del BID de US$45 millones para construir un corredor de transporte público que aliviará las congestionadas calles de la capital salvadoreña
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo de US$45 millones a El Salvador para apoyar el diseño, organización e implementación de un sistema integrado de transporte público que reducirá los tiempos de viaje, los costos de transporte y los accidentes de tráfico en el Área Metropolitana de San Salvador.
El proyecto se propone mejorar el transporte público y el tráfico general en el Área Metropolitana de San Salvador. Esto ayudará a estructurar el sector del transporte público de la ciudad, ofreciendo oportunidades para promover una movilidad sostenible y un transporte seguro para la población, así como para propiciar el desarrollo económico y social.
El proyecto consiste en la construcción de 5,3 kilómetros de carriles preferenciales dedicados a servir autobuses de alta capacidad, con el propósito de reducir los tiempos de viaje en 20 por ciento a lo largo del corredor Soyapango-Metrocentro.
Se espera que el nuevo sistema de transporte,además de estimular la accesibilidad y aumentar el atractivo general de los servicios proporcionados, movilice 200.000 pasajeros por día en 2014, en comparación con 160.000 en 2011.
Además de los carriles segregados para buses, se implementará un corredor de tráfico mixto de unos 2,5 kilómetros. Igualmente, se espera que las aceras que conducen a las terminales de integración y las paradas construidas a lo largo del corredor faciliten el acceso peatonal.
Las rutas alimentadoras de los barrios y pueblos periféricos se conectarán con la ruta troncal en la nueva terminal en Soyapango, aumentando así el volumen de pasajeros y la eficacia del servicio.
Un sistema tarifario integrado, que abarque tanto el corredor troncal como el sistema de alimentación, hará que el servicio se ponga al alcance de los segmentos más pobres de la población, aumentando su acceso al mercado de trabajo.
Las tarifas se pagarán en base a tarjetas de prepago, eliminando la necesidad de contar con dinero en efectivo y convirtiendo al transporte público en una actividad más segura para los ciudadanos y los conductores de autobuses.
El proyecto de cuatro años incluye diversas actividades de capacitación para conductores de autobuses, a quienes se concederá la operación de los buses de alta capacidad en condiciones favorables. Un centro de control de operaciones supervisará los horarios y controlará los autobuses, regulando de ese modo la oferta proporcionada por los operadores de autobuses.
El préstamo del BID tiene un plazo de amortización de 25 años, con un período de gracia de 4 años y una tasa de interés basada en LIBOR.