La recuperación de accesos y rehabilitación del Puerto de Manzanillo ayudarán a reducir costos y tiempos del transporte de carga, aumentando el movimiento de contenedores en la terminal portuaria originados en sector agrícola-industrial y zonas francas del noroeste del país.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo de US$100 millones para República Dominicana, con el fin de mejorar la competitividad y el crecimiento socioeconómico de la zona noroeste del país, mediante la modernización de la infraestructura portuaria y logística. La operación permitirá la construcción de una moderna terminal logística compuesta por una plataforma paralela a la línea de costa de la bahía.

El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) será la entidad responsable de la planificación, ejecución de obras y mantenimiento de infraestructuras viales y portuarias. La Autoridad Portuaria Dominicana (APORDOM), cuyo patrimonio está constituido por todos los recintos de los puertos marítimos propiedad del Estado, administrará la nueva terminal logística y dirigirá la política portuaria para atraer inversiones del sector privado en áreas estratégicas que contribuirán al desarrollo de la zona noroeste del país.

Por sus condiciones naturales y su ubicación estratégica en la ruta de navegación a EE.UU., el Puerto de Manzanillo aspira a convertirse en la principal terminal del noroeste del país. Su ampliación permitirá el atraque de buques de mayor tamaño e incorporar el manejo de carga contenerizada; fomentará, de forma significativa, la exportación de banano y permitirá el desarrollo de nuevas exportaciones originadas en el sector agroindustrial y zonas francas de la región noroeste. Su desarrollo atraerá inversiones privadas que quieren aprovechar su situación territorial geoestratégica.

La rehabilitación y ampliación del Puerto de Manzanillo incorporará modernos estándares de resiliencia y de cuidado del medioambiente natural de la bahía. El proyecto incluye el mejoramiento de la vía principal de acceso al puerto, asegurando una adecuada conectividad y accesibilidad de productores y empresas a nuevos mercados y a centros de producción y consumo, además de favorecer la generación de empleo, con énfasis en la empleabilidad de mujeres e inclusión de personas con discapacidades.

El préstamo de US$100 millones tiene un período de gracia de 5,5 años, con un período de desembolso de 5 años y una tasa de interés basada en Libor.