El especialista en inversiones en mercados incipientes Arturo C. Porzecanski afirma que las economías de América Latina y el Caribe continúan por debajo de las expectativas de los inversionistas, aún cuando han tenido un rendimiento mayor al registrado el año pasado. “Comparado a lo que deberíamos rendir, no nos está yendo bien”, expresó.
Porzecanski, Director General y Jefe de la unidad de investigación en mercados incipientes de ABN AMRO Inc., con sede en Nueva York, expresó que la región no mostró tasas de crecimiento durante los primeros meses de 2003, y que no se espera que la economía crezca hasta el segundo semestre, para cuando se vaticina un crecimiento del uno al dos por ciento.
Las inversiones extranjeras directas no han aumentado y el volumen del comercio es bajo. Porzecanski señaló que el crecimiento económico mundial es uno de los responsables de esta situación, ya que las economías de Japón y de algunos países europeos se encuentran virtualmente “paralizadas”, y el Lejano Oriente se vio negativamente afectado por la epidemia de SARS. América Latina debe realizar cambios más drásticos en sus políticas e instituciones, y al mismo tiempo asumir nuevas actitudes para lograr un mayor crecimiento y atraer más inversiones.
En un seminario organizado el pasado 3 de junio en la sede del Banco Interamericano de Desarrollo en Washington, D.C., Porzecanski declaró que los inversores están muy preocupados con respecto al futuro de las propuestas para introducir reformas que están bajo consideración de los congresos en Argentina, Brasil, y México.
Desde un punto de vista positivo, enfatizó la persistencia de las tendencias favorables para el clima económico de la región, incluyendo las bajas tasas de inflación, la estabilidad monetaria y la solvencia de las cuentas nacionales. Agregó que el nuevo gobierno de Brasil ha restaurado la confianza de los inversionistas en el país a través de las políticas adoptadas desde su asunción al poder. Argentina, por su parte, “se está recuperando” a pesar de enfrentar desafíos formidables de política. Porzecanksi expresó su desencanto con el actual estancamiento económico de México, pero alabó la solidez de la administración financiera y sus tasas de interés, las más bajas registradas en la historia del país.
Porzecanksi citó a los países de Europa Oriental como ejemplos a seguir por América Latina ya que, al estrechar sus lazos comerciales con la Unión Europea, “sus instituciones están cambiando, las reglas del juego cambian, y las modificaciones institucionales ayudan a los países a transformarse”. Agregó que América Latina es más lento que Europa Oriental en aceptar los radicales cambios que suelen acompañar a la integración comercial internacional.
En el seminario realizado en la sede del BID en Washington, D.C., se analizó la efectividad de los diversos instrumentos de los mercados de capital que contribuyen en las respectivas economías nacionales. El BID apoya al desarrollo de los mercados de capital en la región a través de préstamos y garantías. Recientemente, el Departamento del Sector Privado del Banco expandió sus instrumentos financieros a través de operaciones que garantizan la emisión de bonos para proyectos de desarrollo, incluyendo una garantágarantía hipotecaria, así como apoyo al financiamiento de las operaciones de comercio internacional.