El proyecto permitirá la instalación de 300 MW de energía limpia y sustentable con una reducción estimada de 1,1 millones de toneladas de CO2 al año
MÉXICO D.F., México – La Secretaría de Energía de México, Nacional Financiera (NAFIN) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) apoyarán, de manera conjunta, el desarrollo de un programa de mitigación de riesgos para proyectos privados de energía geotérmica del país, en el que la empresa MUNICH RE estará involucrada en el desarrollo de un mecanismo de seguro.
El programa de mitigación de riesgo y financiamiento geotérmico aplicará esquemas innovadores - tales como mecanismos de garantía y seguros - para reducir los riesgos asociados a la exploración de energía geotérmica, uno de los principales obstáculos para el desarrollo de esta fuente de energía limpia en México y en el resto de América Latina. La propuesta de ley secundaria en geotermia en el contexto de la reforma energética, apoyaría el desarrollo del programa reduciendo la percepción de riesgo de los inversores y estableciendo, de manera más clara, las reglas del juego en el ámbito de la exploración y explotación de esta fuente de energía renovable.
Como resultado de este programa se espera generar 300 MW de energía limpia en un periodo de seis años y con ello reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en el país.
México es el cuarto mayor productor de energía geotérmica del mundo con una capacidad instalada efectiva de 850 MW. Sin embargo, éste será el primer proyecto del sector privado en inversión para la generación de energía geotérmica en la historia del país, ya que hasta ahora la totalidad de su producción ha estado a cargo de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
El esquema financiero del programa es el de un fondo revolvente que garantice su sustentabilidad más allá de los seis años de duración del proyecto. Además de los mecanismos de seguros en desarrollo, el proyecto incluirá la posibilidad de otorgar garantías y préstamos convertibles en apoyo financiero no reembolsable, dependiendo de las distintas fases de desarrollo del proyecto.
El préstamo es por un total de US$ 85,8 millones y los fondos no reembolsables suman US$34,3 millones. El proyecto está financiado con US$54,3 millones del Clean Technology Fund (CTF), US$54,3 millones del BID canalizados a través de NAFIN y US$11,5 millones de la Secretaría de Energía de México (SENER).