Omar Darío Cardona, líder experto en desastres naturales en América Latina, dirigió a un grupo de expertos de la región en el diseño de un conjunto de indicadores para evaluar el impacto potencial de desastres naturales en 12 países de la región, su vulnerabilidad a las catástrofes y su capacidad para gestionar tales riesgos.
Los nuevos indicadores, con el apoyo financiero del BID, pueden ser una herramienta para tomar mejores decisiones en toda la región. El sistema se basa en datos de las últimas dos décadas sobre 12 naciones: Argentina, Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Jamaica, México, Perú, y Trinidad y Tobago.
Los indicadores ayudan a monitorear la evolución de la capacidad para gestionar riesgos en cada país. También permiten comparaciones entre los países y son una fuente de información para tomar decisiones acerca de las políticas financiera, económica, ambiental y social. Los indicadores no son solamente útiles para los gobiernos sino también para las provincias, estados o regiones, ciudades y municipios.
El sistema consiste de cuatro índices principales:
El Índice de Déficit por Desastres calcula el impacto macroeconómico y financiero de los riesgos que enfrentan los países debido a posibles catástrofes.
El Índice de Desastres Locales evalúa la frecuencia en la magnitud y distribución de los efectos derivados de la acumulación de daños causados por desastres de pequeña escala, tales como el número de muertos, gente afectada y concentración de pérdidas.
El Índice de Prevalencia de Vulnerabilidad mide la exposición de los países a pérdidas humanas y económicas, su fragilidad socioeconómica y la debilidad institucional e infraestructura.
El Índice de Gestión de Riesgo evalúa cómo los países identifican riesgos, qué hacen para reducirlos, cómo responden y se recobran después de desastres naturales y qué esquemas presupuestarios y de protección financiera aplican para lidiar con los costos de catástrofes.