Pasar al contenido principal

Haití: de la cancha al trabajo

Un programa para jóvenes busca transformar destrezas deportivas en oportunidades de empleo

¿Pueden traducirse las habilidades y la disciplina necesarias para triunfar en el deporte en mejores perspectivas económicas para la gente joven con más necesidades? Robert “Boby” Duval, presidente de la Fondation L’Athlétique d’Haïti, apuesta a que puede suceder en su atribulado país.

Missing media item.

La fundación se está preparando para lanzar la versión haitiana de A Ganar, un programa de deportes para el desarrollo apoyado por una donación de $3,6 millones del Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del BID. El programa, que comenzó como un proyecto piloto en Brasil, Ecuador y Uruguay en 2005, se ha expandido a 11 países, gracias a los esfuerzos de organizaciones locales y la ONG estadounidense Compañeros de las Américas (POA, por su sigla inglesa).

A Ganar es uno entre varios programas de capacitación laboral que apoya el FOMIN en Haití. Aunque su escala es menor a la de programas tradicionales, que apuntan a cubrir a miles de personas, A Ganar probablemente resulte un caso sumamente visible, dada la prominencia de Duval y la pasión haitiana por el fútbol.

Duval, un reconocido deportista en su juventud, creó L’Athlétique en 1995 como un programa para niños pobres en las afueras de Puerto Príncipe. Además de ofrecer entrenamiento en fútbol, baloncesto y atletismo, el programa les brindaba una comida diaria. Luego del terremoto del año pasado, sus campos de juego albergaron a cientos de familias desplazadas.

No obstante la tragedia, la fundación siguió adelante con sus planes para lanzar A Ganar, comenzando con eventos para capacitar a los capacitadores. En octubre sufrieron otro embate cuando se detectó un brote de cólera en Haití. L’Athlétique ahora cuenta también con un centro de tratamiento de cólera.

Para explicar la importancia de programas como A Ganar para su país, Duval los describe como “el eslabón perdido” que podría ayudar a los jóvenes haitianos a pasar al mundo laboral. Los adolescentes en riesgo de caer en pandillas o hábitos malsanos como el consumo de drogas han sido particularmente ignorados por su sociedad.

Imagen eliminada.“Estos muchachos necesitan mentores lo más pronto posible en sus vidas”, afirma Duval. “Además de aprender un oficio, los jóvenes en situación de riesgo social precisan nutrir su autoestima y las destrezas interpersonales que sus orígenes desaventajados les negaron. A Ganar no sólo trabaja los aspectos técnicos de la capacitación laboral sino también el desarrollo psicosocial de los adolescentes, un factor clave para la gente joven de Haití.”

Durante los últimos cinco años A Ganar ha entrenado a más de 6.000 jóvenes de orígenes humildes en 10 países, según el director de programas de deporte para el desarrollo de POA, Paul Teeple. Una evaluación externa del programa halló que ha logrado resultados notables: 78 por ciento de los jóvenes inscriptos llegaron a graduarse. De aquellos que completaron las 240 horas de capacitación, generalmente en seis meses, 68 por ciento consiguieron empleo, retomaron los estudios o abrieron sus propios negocios.

La capacitación de A Ganar, conocido como Vencer en Brasil, consiste en tres fases. Durante la primera, mediante ejercicios en el campo de juego, los jóvenes perfeccionan sus habilidades de comunicación interpersonal, trabajo en equipo y resolución de problemas. Estas son cualidades apreciadas por potenciales empleadores, que buscan candidatos capaces de comportarse como adultos responsables en el trabajo.

Una vez completada esa fase del entrenamiento, los jóvenes participantes comienzan con los cursos de capacitación técnica en distintos oficios como construcción, confección o mecánica. La oferta de cursos varían dependiendo de la demanda del mercado en cada país o región donde se desarrolla el programa, en base a consultas con representantes del sector privado y gobiernos locales.

Imagen eliminada.En la última fase los jóvenes entran como practicantes en empresas, organizaciones sin fines de lucro o dependencias gubernamentales. Aquí es donde las conexiones de Duval con el sector privado haitiano jugarán un papel clave. Los proyectos más exitosos deA Ganar lograron apalancar tales lazos para atraer a gente de negocios experimentada tanto como mentores como fuentes de oportunidades de empleo para jóvenes.

Un beneficio intangible pero fundamental de A Ganar es que genera una mayor confianza en sí mismos entre sus participantes. De los graduados entrevistados para la evaluación del programa, 84 por ciento afirmó que mejoraron sus habilidades para buscar empleos y para participar en entrevistas de trabajo. Teeple recuerda que algunos jóvenes le comentaron que ahora sueñan con un futuro mejor. “A lo mejor sus sueños no son llegar a ser la presidente de la república o el próximo Bill Gates, pero pueden verse en un buen empleo.”

Jump back to top