El Grupo del Banco Interamericano de Desarrollo aprobó nuevas operaciones por más de 9.600 millones de dólares en el 2007, confirmando su condición de principal fuente de financiamiento multilateral para América Latina y el Caribe.
En un informe al Directorio Ejecutivo del BID, el presidente Luis Alberto Moreno señaló que estos resultados reflejan los esfuerzos del Banco por responder “al dinamismo de una región con diversas visiones y modelos de desarrollo, de ser más flexibles, eficientes y versátiles para atender sus demandas y convertirnos así en el principal socio de nuestros países”.
En el 2007 el Banco aprobó 97 proyectos por un total de 9.000 millones de dólares, el mayor monto aprobado desde 1999. En el 2006 el Banco aprobó financiamientos por 6.400 millones de dólares.
La Corporación Interamericana de Inversiones, la entidad del Grupo BID dedicada al financiamiento para la pequeña y mediana empresa, también tuvo un buen año. La CII aprobó 53 operaciones por un total de 486 millones de dólares en el 2007, contra 46 proyectos por 337,7 millones de dólares en el 2006.
El Fondo Multilateral de Inversiones, especializado en microempresa y microfinanzas, aprobó 117 operaciones por 134,3 millones de dólares, de los cuales unos 100 millones de dólares fueron donaciones. El año pasado el FOMIN había aprobado 125 millones de dólares en proyectos.
En sus comentarios al Directorio Ejecutivo, que representa a los 47 países miembros del BID, Moreno destacó la importancia de las operaciones del Banco para financiar obras de infraestructura y para impulsar la productividad, con 51 nuevos préstamos y garantías de crédito por un total de 5.719 millones de dólares.
Moreno señaló que la infraestructura es un sector donde los países latinoamericanos y caribeños aún deben recuperarse de décadas de insuficientes inversiones, en contraste con países asiáticos con economías más dinámicas, como China y Corea.
“Para llegar a ese nivel (América Latina y el Caribe) necesita invertir al menos el doble de lo que invierte en la actualidad en ese rubr 2% del PIB por año, y dedicar entre 4% y 7% del PIB por año durante un período de 20 años para contar con una infraestructura de calidad, que se convierta efectivamente en la columna vertebral que sostiene nuestro desarrollo”, afirmó Moreno.
Perspectivas para el 2008
Según el informe al Directorio Ejecutivo, las perspectivas para América Latina y el Caribe para el 2008 son favorables, no obstante la inestabilidad reciente en los mercados financieros internacionales. Las proyecciones de consenso apuntan a un crecimiento regional entre 4% y 4,5% para el próximo año, contra 5% en el 2007. La disminución se debería en parte a la desaceleración económica en los Estados Unidos y una posible moderación en los precios de materias primas exportadas por países latinoamericanos.
La inflación, que en el 2006 llegó a un mínimo histórico de 5%, llegó a un promedio regional de 5,3% en el 2007. Según diversas proyecciones, tenderá a aumentar en varios países en el 2008. En materia fiscal, muchos países que registraron superávit primarios podrían pasar a déficit el año próximo, dado que pocos han tomado medidas para fortalecer sus ingresos tributarios y compensar el crecimiento del gasto público.
En cuanto a impacto social, en el 2007 la región alcanzó los niveles de pobreza más bajos en 17 años (35,1% para pobreza y 12,7% para indigencia). Sin embargo, hay grandes disparidades entre países de la región. Mientras Brasil, Chile y México ya han alcanzado el Objetivo de Desarrollo del Mileno de reducir la pobreza extrema a la mitad del nivel registrado en 1990, varios países están lejos de lograr sus metas.
Otros hechos destacados del 2007
Para atender con mayor agilidad las necesidades de financiamiento de los países prestatarios de América Latina y el Caribe durante este año el BID impulsó reformas internas para simplificar sus procedimientos y asignar mayor responsabilidad operativa a las representaciones, sus oficinas en los 26 países prestatarios.
Gracias a la implementación de nuevas políticas, el Banco logró un fuerte aumento en aprobaciones de operaciones sin garantía soberana. Este año se aprobaron 28 préstamos y garantías parciales de crédito, tanto para clientes del sector privado como del sector público, por un total de 2.300 millones de dólares, contra 960 millones de dólares en el 2006.
En materia de innovaciones, el BID puso en marcha dos fondos para financiar proyectos relacionados con su Iniciativa de Energía Sostenible y Cambio Climático. Estas iniciativas permiten al Banco colaborar con una diversidad de contrapartes en temas clave para América Latina y el Caribe, como impulsar una industria de biocombustibles sostenible y buscar soluciones creativas para ganar eficiencia energética.
Moreno además calificó de “histórico” el alivio de deuda por valor de 4.400 millones de dólares que aprobó este año el BID para Bolivia, Guyana, Haití, Honduras y Nicaragua. A diferencia de otras instituciones, el BID financiará esta iniciativa sin aportes externos.
Para el 2008, agregó, el BID espera poner en marcha nuevos proyectos inspirados de Oportunidades para la Mayoría, una iniciativa orientada a ampliar el acceso de las grandes mayorías de bajos ingresos a herramientas y servicios que les permitan acumular un patrimonio y mejorar su calidad de vida.