El Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del Banco Interamericano de Desarrollo apoyará con hasta 5.250.000 dólares en financiamiento un proyecto piloto con Banco Agrícola de El Salvador para crear préstamos hipotecarios transnacionales para salvadoreños residentes en los Estados Unidos que quieren comprar propiedades en su país de origen.
Unos 2,6 millones de salvadoreños viven en los Estados Unidos, concentrados mayormente en California, Nueva York, Maryland y Virginia. Esas comunidades de inmigrantes enviaron remesas por más de 2.800 millones de dólares a su patria el año pasado.
Banco Agrícola estima que unos 500.000 emigrados salvadoreños podrían ser potenciales compradores de viviendas en El Salvador. El banco ya ha hecho unos 400 préstamos hipotecarios a salvadoreños radicados en los Estados Unidos pero esas operaciones requirieron que los prestatarios viajaran a su patria para formalizar los contratos, sumando costos de transacción.
El proyecto piloto apoyado por el FOMIN ayudará al Banco Agrícola a desarrollar un nuevo préstamo hipotecario transnacional que no requerirán que los prestatarios estén presentes en El Salvador para cerrar las operaciones. El banco también hará acuerdos con empresas urbanizadoras en El Salvador y corredores de propiedades en los Estados Unidos para que vendan viviendas a los emigrados.
El financiamiento provisto por el FOMIN consistirá en un préstamo de hasta 5 millones de dólares y una donación de cooperación técnica por 250.000 dólares. El préstamo se usará para fondear los nuevos préstamos hipotecarios, que serán ofrecidos a través de la red del Banco Agrícola en los Estados Unidos, que cuenta con 23 oficinas de transferencias de dinero y tres sucursales bancarias.
La cooperación técnica apoyará las inversiones de Banco Agrícola para desarrollar un sistema informático para administrar los préstamos hipotecarios transnacionales, así como para capacitar al personal bancario, de las urbanizadoras y de las corredoras de propiedades. Además se elaborará una estrategia para promover urbanizaciones salvadoreñas en los Estados Unidos y se hará un estudio sobre la potencial demanda de otros productos financieros relacionados con las remesas.
El FOMIN, que promueve el desarrollo del sector privado en América Latina y el Caribe, espera que el proyecto piloto permita que más emigrados salvadoreños puedan acumular activos en su patria, así como movilizar una mayor porción de sus ahorros a través del sistema financiero formal para apalancar el impacto de desarrollo de sus remesas.
El nuevo proyecto refleja los principios de Oportunidades para la Mayoría, una iniciativa lanzada este año por el BID para ampliar el acceso de las personas de bajos ingresos de América Latina y el Caribe a productos y servicios que pueden ayudarlas a acumular activos y mejorar su calidad de vida.