El Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) anunció hoy la aprobación de una donación de US$ 849.650 para mejorar la gestión de riesgos crediticios y sus instrumentos de evaluación, así como también para modernizar las tecnologías utilizadas en el sistema financiero del Perú.
El principal objetivo de esta operación es mejorar las condiciones de acceso al crédito para empresas y familias.
“El proyecto sensibilizará y capacitará a las instituciones financieras para mejorar la gestión de riesgos y apoyará los esfuerzos de la Superintendencia de Banca, Seguros y Administradoras Privadas de Fondos de Pensiones (SBS) y del sistema financiero para implementar una Central de Riesgos por Operaciones (CRO)”, dijo el jefe del equipo del proyecto del BID, Luis Alberto Giorgio.
A pesar de que el sistema financiero peruano (SFP) se ha fortalecido de manera sostenida durante los últimos seis años, el acceso al crédito no ha evolucionado a un ritmo similar. Según cifras oficiales, el crédito bancario al sector privado representa apenas 17% del Producto Interno Bruto (PIB), en comparación al 26% de hace seis años.
“La falta de acceso al crédito socava la competitividad del sector productivo, por lo cual fortalecer el SFP y mejorar las condiciones de acceso al crédito son objetivos prioritarios de la estrategia de crecimiento sostenible de Perú”, dijo Giorgio
La CRO integrará información ya existente sobre deudores de las entidades financieras con información de sus operaciones y la pondrá a disposición del sistema financiero en forma agregada, para permitir una evaluación más precisa de riesgos crediticios. Esto promueve un mejor acceso al crédito, especialmente para las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyME).
“La CRO beneficia a las MiPyME contribuyendo a aumentar la reducida información que tienen las instituciones financieras sobre estas empresas, situación que limita significativamente el acceso de éstas al sistema financiero formal”, añadió Giorgio
El proyecto no sólo fortalecerá a las instituciones financieras al facilitar el desarrollo de tecnologías de medición de riesgo siguiendo estándares internacionales, sino que también fortalecerá la capacidad de regulación y supervisión de la SBS, la entidad ejecutora del proyecto.
“La ejecución del proyecto promoverá también la asociación entre los sectores público y privado para mejorar la competitividad del sector productivo”, concluyó Giorgio.