El financiamiento no reembolsable aprovechará recursos históricos, culturales y naturales para crear empleos
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó una donación de US$36 millones para fomentar el turismo con base en los recursos históricos, culturales y naturales de la costa sur de Haití, que creará empleos para los residentes de la región que perciben bajos ingresos.
Gracias a sus acogedoras playas, su rico paisaje tropical, su singular historia cultural como la primera república negra del mundo y su proximidad a los Estados Unidos, Haití tiene mucho para ofrecer a los turistas, pero son escasas las probabilidades de que éstos acudan al país en grandes contingentes, hasta que no se generalice la noción de que el medio ambiente es límpido, los guías turísticos están debidamente capacitados y equipados con implementos y embarcaciones apropiados y la seguridad no es motivo de preocupación.
Para atender a esos aspectos y crear oportunidades de empleo para los residentes en la costa sur de Haití, la donación ayudará al gobierno a poner en práctica un programa de turismo bien planificado, que combine desarrollo de infraestructura, capacitación laboral y formación de capacidad en el gobierno.
Los empleos son escasos en Haití y más de 80% de los habitantes del medio rural sobreviven como agricultores de subsistencia y sólo 60% trabaja en el sector formal, lo que hace que constituyan el mayor núcleo de sub empleados en el hemisferio. Las autoridades tropiezan con numerosas dificultades en su lucha para combatir los efectos del cambio climático y otros desastres naturales, la degradación del medio ambiente debida a la deforestación, la pesca excesiva y la eliminación deficiente de los residuos sólidos.
Sólo 10% de los sitios históricos y zonas protegidas de la costa sur poseen las instalaciones apropiadas para constituir destinos propicios para los turistas. En la pintoresca población playera de Port Salut, por ejemplo, hay pocos hoteles que puedan considerarse atractivos y cómodos para la mayoría de los turistas extranjeros y sus playas lucen considerablemente afectadas por la erosión y suelen estar contaminadas por los residuos y la falta de sistemas de saneamiento adecuados. Otras poblaciones costeras, como Aquin, ofrecen festivales internacionales populares y espectaculares fuertes coloniales, pero carecen de instalaciones adecuadas para recibir visitantes y necesitan trabajos de preservación de lugares históricos.
Casi 71 por ciento del financiamiento no reembolsable se destinará al mejoramiento del producto turístico mediante la limpieza ambiental, la rehabilitación de sitios históricos y la construcción de mercados de artesanos y otros espacios culturales. Otro 12 por ciento se usará para el mejoramiento de la capacidad de organización de las autoridades turísticas, así como la capacitación de trabajadores en los sectores de la hospitalidad, las excursiones y el esparcimiento.
El programa de turismo tiene potencial para la generación de ingresos sumamente necesarios para los habitantes de escasos recursos de la región sur de Haití, que pueden obtener empleo como guías turísticos y empleados de hoteles, instalar sus propias empresas pequeñas o pescar, producir y distribuir alimentos por los mercados locales que alimentan a turistas y trabajadores por igual.