Brasil promoverá nuevos modelos de vivienda para población vulnerable

Préstamo del BID por US$54.5 millones contribuirá a facilitar el acceso a soluciones habitacionales de interés social

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo a Brasil de US$54.5 millones con el objetivo de promover nuevas estrategias de vivienda y mejorar el hábitat, con foco en población de bajos ingresos. Es la primera operación de una línea de crédito condicional para proyectos de inversión (CCLIP), bajo la cual podrán aprobarse operaciones individuales de inversión por un monto total de hasta US$600 millones.

Los temas promovidos transversalmente serán género y diversidad; cambio climático y sostenibilidad ambiental, y digitalización.

Con este crédito, que fue aprobado por el Directorio Ejecutivo del BID, se pretende dotar desde el ámbito federal a actores públicos, privados y de la sociedad civil de nuevas herramientas para facilitar y diversificar el acceso a soluciones de vivienda digna. Los objetivos específicos de la operación son conectar la oferta y la demanda de vivienda; desarrollar e implementar un programa nacional de microfinanciamiento para mejora de las viviendas sostenibles para familias de bajos ingresos; y fortalecer el plan nacional de vivienda mediante la promoción de la sostenibilidad socioambiental y la formación de funcionarios de los gobiernos subnacionales y profesionales del sector.

Según datos de 2019, unos 30 millones de hogares en Brasil se encuentran en rezago habitacional, entre déficit cuantitativo y cualitativo. Esta situación afecta, sobre todo, a población de bajos ingresos. El déficit cuantitativo se estima en 5,9 millones viviendas adicionales, con un incremento previsto de 1,2 millones al año hasta 2030 por la formación de nuevos hogares.

Pero el mayor déficit habitacional en Brasil se encuentra en hogares con vivienda inadecuada, lo que se conoce como déficit cualitativo, que en 2019 superó los 24 millones de viviendas. Son viviendas existentes con falta de infraestructura básica (agua, saneamiento, energía), tenencia legal de la tierra o precariedad de la construcción.

El nuevo programa nacional de vivienda ‘Mi casa, mi vida’, lanzado en 2023 bajo el liderazgo de la Secretaría Nacional de Vivienda (SNH) del Ministerio de las Ciudades, atiende estos dos desafíos. Para ello, se intenta impulsar la producción de nuevas viviendas, mejorar las ya existentes y llevar a cabo acciones de fortalecimiento institucional con enfoque en los grupos más vulnerables. Entre estos se encuentran personas con bajos ingresos, mujeres e individuos con discapacidad.

Para que todo ello sea posible, Brasil se posicionará a la vanguardia de la región con una plataforma digital nacional que contenga información de demanda y oferta de vivienda para una atención más efectiva al déficit habitacional. La creación de una garantía federal de primeras perdidas para microcréditos de mejoramiento de vivienda permitirá atraer inversión privada al sector vivienda y promover financiamientos más asequibles. Además, está prevista la puesta en marcha de planes de formación de profesionales de la arquitectura y la ingeniería especializados en la mejora de la vivienda con sostenibilidad socioambiental y climática.

Los beneficiarios finales de este programa serán las familias de bajos ingresos, los gobiernos subnacionales (estados y municipios), los agentes del sector privado y la sociedad civil.