Como continuación de los esfuerzos por desarrollar nuevos mecanismos de financiación para bancos multilaterales de desarrollo en materia de cambio climático y de las conversaciones en curso con la Secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Janet Yellen, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Fundación Rockefeller anunciaron una alianza para apoyar la ampliación del acceso a la energía, la transición hacia la energía verde y la creación de empleo en América Latina y el Caribe.

El BID y sus entidades asociadas han anunciado una nueva alianza con la Fundación Rockefeller que creará un instrumento de financiación dedicado a expandir el acceso a la energía, apoyar la transición energética y proteger el clima en América Latina y el Caribe. 

El anuncio también se produce tras una reunión entre el Presidente del BID, Mauricio Claver-Carone, y el Presidente de la Fundación Rockefeller, Dr. Rajiv J. Shah, en la que hablaron sobre cómo acelerar la recuperación pospandémica y la transición energética verde en la región. El Presidente Claver-Carone compartió la noticia de la acción del BID después de una reunión entre la Secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, y bancos multilaterales de desarrollo sobre cómo estos pueden tomar medidas innovadoras para abordar la acción climática. 

El instrumento de financiación, que se anunciará formalmente en la COP26, será gestionado por el Grupo BID y destinará recursos para proyectos de los sectores público y privado. Además, este instrumento busca movilizar más de US$600 millones en nuevas inversiones para América Latina y el Caribe. 

La colaboración también se centrará en la creación de empleo y en la igualdad de género, con objetivos claros para asegurar que las mujeres sean beneficiarias prioritarias. Esta alianza es un reflejo de la sólida alineación de las misiones del Grupo BID y la Fundación Rockefeller, y además aborda varios de los pilares de la Visión 2025 del BID, que describe las oportunidades para acelerar la recuperación pospandemia de la región. Asimismo, esta asociación se alinea con el objetivo de la Fundación Rockefeller de crear una plataforma global para luchar contra el cambio climático y erradicar la pobreza energética.

"Acelerar el desarrollo sostenible en América Latina y el Caribe requiere colaboración y estamos comprometidos a trabajar de manera innovadora, con socios nuevos para alcanzar nuestros objetivos de sostenibilidad y crecimiento", señaló el Presidente Claver-Carone. "Por eso, es un gran placer para mí aunar esfuerzos con la Fundación Rockefeller, una reconocida institución filantrópica que comparte nuestro compromiso de proteger a las personas y al planeta, y cuyos recursos financieros y experiencia pueden amplificar nuestro impacto en la región a medida que avanzamos hacia una nueva era de infraestructura verde". 

La alianza también es significativa porque representa la primera colaboración del Grupo BID con una fundación filantrópica en el sector de la energía y lo posiciona como socio principal de la Fundación Rockefeller en América Latina y el Caribe. 

"Esperamos trabajar con el Banco Interamericano de Desarrollo e invertir juntos en las soluciones de energía verde que son fundamentales para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero que empeoran la crisis climática, y para aumentar el empleo y las oportunidades económicas para las personas en economías emergentes y en desarrollo", afirmó el Dr. Rajiv J. Shah, Presidente de la Fundación Rockefeller. "Contar con un servicio de electricidad confiable es fundamental para todos los aspectos de la vida actual. Nuestro éxito permitirá a los agricultores aumentar sus cosechas; a los empresarios contratar trabajadores; a los niños asistir a la escuela y estudiar durante la noche; a las familias acceder a una atención sanitaria moderna, todo ello mientras garantizamos que tengamos un planeta seguro y saludable para las futuras generaciones".

Ambos socios colaborarán específicamente para cerrar las brechas de la última milla en el acceso a la energía y la electrificación en América Latina y el Caribe, mediante servicios de energía renovable distribuida, el apoyo a la transición energética hacia sistemas de energía neta cero y la protección del clima, con un enfoque en las comunidades desatendidas y subatendidas. Además, los socios comparten el objetivo de ayudar a la región a lograr el acceso universal a la electricidad para el 2030, de acuerdo con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.