El Banco Interamericano de Desarrollo y la Fundación One Laptop Per Child (OLPC) financiarán un proyecto piloto para evaluar si el modelo de aprendizaje basado en asignarle una computadora portátil a cada alumno puede mejorar la educación en Haití, el país más pobre de las Américas.
OLPC fabrica la XO, una computadora portátil de bajo costo diseñada para niños en países con infraestructura deficiente. Las robustas máquinas, que utilizan programas de código abierto (open source), funcionan con fuentes de energía como baterías de automóvil, paneles solares, pedales o manivelas.
El BID hará una donación de 3 millones de dólares al proyecto piloto, que distribuirá computadoras portátiles XO a unos 13.200 estudiantes y 500 maestros en 60 escuelas primarias haitianas. OLPC aportará 2 millones de dólares a la iniciativa.
“Llegar a Haití siempre ha sido un objetivo importante para OLPC, ya que se trata de uno de los países más pobres del mundo”, comentó Nicholas Negroponte, fundador y presidente de la Fundación One Laptop Per Child. “Al trabajar con nuestro socio, el Banco Interamericano de Desarrollo, no sólo tendremos el mejor equipo sino también un modelo para otros países en América Latina y el Caribe.”
La jefa del equipo de proyecto del BID, Emma Naslund-Hadley, agregó: “Tenemos estudios acerca del impacto de los laboratorios de computación y computadoras compartidas en las aulas, pero aún no ha habido una evaluación amplia del modelo de aprendizaje basado en darle a cada alumno una computadora portátil. Esto es fundamental para determinar la efectividad del modelo bajo condiciones de extrema pobreza y como herramienta para acelerar el aprendizaje”.
El proyecto piloto evaluará cómo se puede utilizar una tecnología de aprendizaje centrada en el niño para resolver problemas como la falta de maestros certificados y la instrucción de niños de distintos grados en una misma aula. Otro desafío prioritario para el gobierno haitiano es acelerar el proceso de aprendizaje de estudiantes que ingresan tarde a la primaria o repiten grados.
Bajo el proyecto se traducirá al creole libros de texto, películas, archivos de audio y documentos electrónicos y se crearán programas para materias como lectura y escritura, aprendizaje de números y solución de problemas, estudios ambientales y destrezas sociales.
Los maestros y los alumnos recibirán entrenamiento para operar las computadoras portátiles y realizar tareas de mantenimiento básico. Las reparaciones más complejas quedarán en manos de estudiantes de escuelas vocacionales y asesores de tecnología locales.
La Oficina Regional para la Educación en América Latina y el Caribe de la UNESCO llevará a cabo pruebas de matemáticas y lenguaje antes y después del proyecto piloto para medir su desempeño desde un punto de vista cuantitativo.
Para tener una evaluación cualitativa, se observarán las prácticas en las aulas para determinar si el modelo de aprendizaje de una computadora por cada alumno influye en actitudes y comportamientos relacionados con la administración escolar, la valoración de la educación en las familias, el uso de las computadoras en los hogares y la percepción del progreso de los estudiantes.
El proyecto piloto también ayudará a Haití a evaluar los elementos necesarios para diseñar y lanzar una estrategia nacional para implementar este modelo de aprendizaje en todo el sistema de educación primaria.
Las computadoras portátiles de OLPC ya están siendo utilizadas en programas educativos en dos países miembros del BID, Perú y Uruguay, que recientemente anunciaron expansiones de sus iniciativas.