El Banco Interamericano de Desarrollo anunció hoy que envió una misión técnica a Haití esta semana para analizar con las autoridades haitianas la reanudación de operaciones crediticias en apoyo a programas sociales y de infraestructura básica.
El gobierno haitiano cayó en retrasos en sus pagos de deuda el año pasado. Las políticas del BID le impiden desembolsar préstamos a países que están en mora. Dicha restricción no comprende a las donaciones, cuyos desembolsos han seguido en apoyo de ONG y otras instituciones que trabajan en Haití.
Las autoridades haitianas y la administración del BID mantuvieron una primera ronda de conversaciones en agosto, durante las cuales el gobierno haitiano manifestó sus intenciones de cumplir con sus compromisos financieros.
Desde entonces, el BID trabajada para actualizar cuatro préstamos concesionales por un total de casi 149 millones de dólares aprobados entre 1997 y 1998 para apoyar programas de educación, salud, agua potable y caminos.
El BID ha sido una de las principales fuentes de financiamiento externo para Haití desde que retornó a la democracia en 1994. Los préstamos a ese país habían sido suspendidos en 1991 luego de que un golpe militar interrumpió el proceso constitucional.
Desde que Haití recuperó la democracia el BID desembolsó más de $326 millones de dólares para apoyar programas de educación, salud y agua y saneamiento, así como para financiar proyectos de reconstrucción de caminos, puentes y otras obras de infraestructura, energía, producción agropecuaria y reforestación.