El Banco Interamericano de Desarrollo anunció hoy la aprobación de un préstamo sectorial a Uruguay por 75 millones de dólares destinado a mejorar la cobertura, calidad y eficiencia del sistema de salud.
Los recursos ayudarán al gobierno a llevar a cabo un conjunto de acciones de políticas que permitirán reducir los costos y mejorar la calidad de los servicios de salud, en un marco de competencia regulada tanto para proveedores de servicios privados como públicos. Al mismo tiempo, la reforma asegurará un mejor acceso a los servicios de salud de los grupos más vulnerables de la población.
El programa unificará, integrará y sistematizará las regulaciones existentes del sistema de salud y sentará las bases de un marco regulatorio perfeccionado que fortalezca los sistemas de prestación de servicios de salud públicos y privados y promueva su complementariedad.
Se establecerá una instancia regulatoria para monitorear sistemáticamente a las instituciones de salud y adoptar medidas preventivas de fiscalización. También se contemplan acciones para proteger los derechos de los usuarios y poner más énfasis en las tareas preventivas y de promoción de salud.
El programa considera medidas para promover un modelo de gestión más eficiente en las Instituciones de Asistencia Médica Colectiva, que incluirá la aplicación de planes de reconversión para estabilizar financieramente a estas instituciones, junto a su adhesión a un estatuto tipo cuyo objetivo es separar las funciones directivas de las responsabilidades propiamente gerenciales, la eliminación de conflictos de interés y la profesionalización de la gestión.
El sistema público de salud se modernizará siguiendo los lineamientos establecidos por la Ley de Presupuesto Quinquenal 2000-2004. Entre otras disposiciones legales contempladas se incluyen las facultades para la reestructuración organizacional del Ministerio de Salud, la separación de funciones dentro del sistema público de salud y el establecimiento de compromisos de gestión para asignar recursos a las unidades prestadoras de servicios.
Este programa fortalecerá, además, la capacidad técnica del Ministerio de Salud*.
Se espera que el proyecto contribuya significativamente a revertir la espiral alcista de los costos en salud y reduzca en consecuencia su presión sobre el presupuesto público, los costos laborales y el presupuesto de las familias.
El costo total del programa es de 150 millones de dólares. El préstamo del BID se otorga a un plazo de 20 años, con un período de gracia de cinco años, a la tasa de interés anual variable de la facilidad en dólares estadounidenses, actualmente de 6,97 por ciento.