El Banco Interamericano de Desarrollo anunció hoy la aprobación de un préstamo de 60 millones de dólares a Perú para la primera fase de un programa de 200 millones de dólares destinado a apoyar la transformación del sector vivienda y a movilizar al sector privado para invertir y generar oferta privada de vivienda para sectores de bajos ingresos.
Los recursos ayudarán a financiar subsidios a propietarios de bajos ingresos, estimular la inversión privada en la urbanización de tierras, mejorar infraestructura y servicios en vecindarios de bajos ingresos y apoyar el actual proceso de modernización de la administración pública encargada de vivienda y desarrollo urbano.
Culminada esta primera fase de tres años se espera que el BID otorgue un préstamo adicional de 100 millones de dólares. Los fondos de contraparte local de las Fases I y II suman 15 y 25 millones de dólares respectivamente. El programa será ejecutado por el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento*.
Uno de los componentes del proyecto es un programa de bonos habitacionales entregados a familias de bajos ingresos para adquirir, construir o mejorar su vivienda, que beneficiará a unas 115.000 personas. Se otorgarán 9.100 bonos de 3.600 dólares cada uno para comprar casas que cuesten entre 4.000 y 8.000 dólares.
El proyecto financiará también la urbanización de predios estatales, actualmente subutilizados, construyendo casas de bajo costo que beneficiarán a unas 12.000 personas e incentivando la participación del sector privado.
Otras 13.250 personas se beneficiarán con un programa de mejoramiento integral de barrios.
MIVIVIENDA, fondo gubernamental de financiamiento de segundo piso, modificará sus políticas de asignaciones para beneficiar a los sectores más necesitados del mercado.
Un objetivo del programa de vivienda de Perú es crear un mercado hipotecario y financiamiento del sector privado para potenciales propietarios de bajos y medianos ingresos que actualmente no tienen acceso a crédito hipotecario.
Movilizando recursos del sector privado y dirigiendo eficientemente los subsidios a sectores de menor ingreso, el programa organizará un sistema que reducirá el severo déficit de viviendas que sufre el país. Se estima que un 42 por ciento de la población vive en casas de baja calidad y sólo un 10 por ciento de casas se construye por el sector formal.
El préstamo del BID tiene un plazo de 25 años, con un período de gracia de 42 meses y tasa de interés anual variable, actualmente del 5,8 por ciento.