El Banco Interamericano de Desarrollo anunció una iniciativa para mejorar el ambiente de negocios y promover las inversiones en América Latina y el Caribe a través de préstamos y asistencia técnica.
Esta iniciativa fue presentada en una reunión cumbre de más de 200 representantes de los sectores público y privado en Washington, D.C. el 4 de diciembre y está destinada a colaborar con los países para eliminar los obstáculos y adoptar medidas para atraer y mantener más inversiones.
La inversión privada actual es claramente insuficiente para satisfacer las necesidades de crecimiento de la región, por lo que se requieren renovados esfuerzos para atraer y mantener el flujo de recursos, señalaron los participantes en el encuentro, que incluyeron a ministros, otros altos funcionarios públicos, empresarios y expertos internacionales.
Para crear empleo y crecer es clave la inversión privada. Las necesidades anuales de inversión de la región en infraestructura son del orden de 70.000 millones de dólares y apenas se está invirtiendo 45.000 millones”, afirmó el presidente del BID Enrique V. Iglesias en la reunión cumbre.
Iglesias agregó que se requiere un esfuerzo renovado para crear los marcos legales y reguladores adecuados para estimular los negocios y para desarrollar las instituciones adecuadas para aplicar las leyes y reglas. No obstante los avances logrados en la estabilidad macroeconómica en la región, los costos operativos de las empresas “continúan siendo muy poco competitivos, debido a instituciones débiles, reglas de juego a veces contrarias a la inversión, infraestructura inadecuada y un limitado acceso a recursos financieros”.
El subsecretario del Tesoro de los Estados Unidos, John B. Taylor, destacó la importancia del sector de la pequeña y mediana empresa como generador de 80 por ciento de los empleos y la paradoja de que muchos de los países más pobres son los que más trabas ponen a la creación de nuevas empresas. Los pilares del crecimiento son la libertad económica, la inversión en la gente y el gobierno justo, incluyendo el combate contra la corrupción, sostuvo.
El presidente de Chile, Ricardo Lagos, instó en un mensaje desde Santiago de Chile a los países latinoamericanos a hacer inversiones sociales focalizadas para complementar las políticas que promueven el crecimiento económico. “Sin cohesión social, no existe ninguna posibilidad de competir en el mundo”, enfatizó Lagos. La aceptación de las reformas, agregó, estará en función de que sus beneficios se traspasen a la sociedad.
Iniciativa Ambiente de Inversiones
La “Iniciativa Ambiente de Inversiones” del BID presentada en la reunión contempla apoyar a los países para realizar un diagnóstico e identificar sus prioridades para crear un clima más favorable a la inversión privada mediante el financiamiento de planes de acción que se focalicen en operaciones.
“A partir del diagnóstico, es necesario identificar acciones específicas para superar los impedimentos que encuentran las empresas para su fluido desarrollo”, afirmó Dennis Flannery, vicepresidente ejecutivo del BID. “El Banco apoyará a los países con préstamos y asistencia técnica para encarar acciones y evaluar resultados en los próximos tres años”.
Debate de ideas
En un panel sobre la aceptación y la sostenibilidad de las reformas, el ministro de Economía y Energía de Chile, Jorge Rodríguez Grossa, describió el amplio espectro de medidas adoptadas por su país para impulsar la competitividad y el crecimiento, con buena llegada a la población.
El ministro de Planificación de Brasil, Guido Mantega, resaltó la importancia de la estabilidad política más allá de la estabilidad económica esencial para atraer inversiones. “Para el crecimiento es esencial balancear correctamente reformas y estabilidad política”, sostuvo. Destacó, además, la importancia de una amplia participación para la profundización de la democracia y los beneficios de seguir una estrategia realista advirtiendo a los ciudadanos que las medidas para lograr una mejor calidad de vida requerirán sacrificios.
El economista jefe del BID Guillermo Calvo, el director del Departamento de Clima de Inversiones del Banco Mundial Neil Roger y la directora de McKinsey Global Institute Diana Farrell, plantearon experiencias exitosas y errores que han tenido impactos negativos en el flujo de inversiones en los últimos años.
Ejecutivos del sector privado analizaron aspectos específicos que influyen en forma significativa en el ambiente de inversiones, tales como la transparencia, las leyes de quiebra y derechos de los acreedores, los regímenes legales y los derechos de propiedad y la burocracia en los trámites.
En la reunión se destacó adicionalmente la importancia de la comunicación durante todo el proceso de reforma para mejorar la aceptación política y de la sociedad y de reportar sobre los resultados en procesos transparentes.
En la última década el BID ha invertido más de 13.000 millones de dólares para promover mejores condiciones para el desarrollo del sector privado en América Latina y el Caribe en programas dirigidos a fortalecer a los mercados financieros, fortalecer y desarrollar instituciones públicas y estructuras legales adecuadas y promover la estabilidad económica y la apertura comercial.