CIUDAD DE GUATEMALA – América Latina necesita una “revolución de la microempresa” para aprovechar plenamente las oportunidades que brinda la integración y adaptarse a los profundos cambios que vive la región, afirmó hoy el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Enrique V. Iglesias.
Al inagurar el VI Foro Interamericano de la Microempresa en la capital guatemalteca, Iglesias señaló que la microempresa se ha convertido en una fuerza estabilizadora para América Latina y el Caribe, especialmente en momentos de crisis.
Sin embargo, agregó, será necesario reforzar el apoyo a este sector, creando condiciones propicias para el crecimiento de sus negocios y la ampliación del acceso al crédito y a servicios de desarrollo empresarial que permitan a estos emprendendores ganar en competitividad.
“Los microempresarios necesitan esa revolución”, dijo Iglesias en su discurso ante casi 1.000 participantes en el foro. “No podemos sacarle el cuerpo a ese desafío que es la modernización de la microempresa”.
Según estudios del BID, en América Latina existen unas 50 millones de microempresas. Estas modestas unidades económicas, que generalmente emplean a menos de 10 personas, ayudan a reducir la pobreza, generan empleo, mejoran la distribución del ingreso y multiplican las oportunidades de progreso para personas de escasos recursos, en particular las mujeres y los jóvenes.
El BID organiza anualmente este foro, que reúne a representantes de instituciones microfinancieras, cooperativas de crédito, bancos comerciales, fondos de inversión, fundaciones, organizaciones no gubernamentales, asociaciones comunitarias, entidades de gobierno, agencias de cooperación bilateral y organizaciones multilaterales que apoyan el desarrollo de la microempresa y las microfinanzas en América Latina y el Caribe.
Durante dos días los participantes intercambiarán ideas y experiencias derivadas de programas para aumentar la efectividad y ampliar el acceso a los servicios financieros y de desarrollo empresarial para la microempresa. Asimismo analizarán alternativas para eliminar las barreras burocráticas que frenan a los microemprendedores, así como iniciativas de empresariado social para mejorar la calidad de vida en las comunidades pobres.
En su discurso Iglesias puso de relieve la expansión del microcrédito en América Latina y el Caribe. Según el BID, en la actualidad hay 184 instituciones financieras en 17 países de la región que prestan servicios a unos 1,8 millones de clientes microempresarios, quienes han accedido a préstamos por un valor total aproximado de 1.200 millones de dólares. Las instituciones van desde ONG que operan en zonas rurales hasta bancos comerciales en las grandes ciudades.
Este crecimiento, dijo el presidente del BID, es señal de que los capitales privados están comenzando a ser canalizados a las microfinanzas. No obstante, instó a los participantes del foro a seguir trabajando para “seducir a los mercados financieros formales para que vean que detrás de estas microempresas hay buenos negocios”.
Iglesias hizo hincapié en la necesidad de ayudar a las microempresas a ganar competitividad, especialmente ante el avance de la integración regional y las negociaciones de acuerdos de libre comercio, procesos que tendrán profundos impactos en la región.
Apoyo del BID a la microempresa
El BID, que ha dedicado más de 800 millones de dólares a programas para la microempresa en los últimos 25 años, buscará hacer más efectivo su respaldo a este sector, financiando programas innovadores que abran el acceso a más y mejores servicios para los microemprendedores.
El apoyo del BID abarca desde los grandes créditos globales por decenas de millones de dólares para financiar programas nacionales de micropréstamo hasta donaciones de unos cientos de miles de dólares para solventar proyectos de desarrollo económico y comunitario a través de su Programa de Empresariado Social.
Asimismo, el Fondo Multilateral de Inversiones del BID hace inversiones, préstamos y donaciones para fortalecer a instituciones microfinancieras y organizaciones que prestan servicios de desarrollo empresarial para aumentar la productividad de los microemprendedores.
Premios al Desarrollo de la Microempresa
Como parte del foro, el BID entregará los Premios Interamericanos al Desarrollo de la Microempresa. Estos galardones anuales reconocen el liderazgo de entidades y dirigentes sociales que apoyan a la microempresa y al desarrollo comunitario.
Este año los ganadores son la Fundación para el Desarrollo y la Educación de la Mujer Indígena (FUNDEMI/TALITA KUMI) de Guatemala, la Fundación José Nieborowski de Nicaragua, la Caja Municipal de Ahorro y Crédito de Trujillo, Perú, y Moema Cunha Leão, gerente de una fundación brasileña que lleva adelante un programa de capacitación laboral para mujeres pobres y presidiarias para facilitar su reintegración a sus comunidades.