El papel del BID durante desastres naturales inesperados
La principal finalidad de la participación del Banco en la esfera de los desastres naturales e inesperados es asistir a los países miembros a proteger eficazmente y resumir su desarrollo socioeconómico.
El Banco también procura ayudar a los países miembros a tomar medidas adecuadas para reducir o evitar las pérdidas que ocasionan todos los desastres. A pedido de dichos países, el Banco participará para aumentar la capacidad del país de tomar en cuenta su vulnerabilidad a los desastres en sus proyectos y programas de desarrollo y de dar una respuesta a ellos.
Son objetivos específicos la preparación para hacer frente a aquellos peligros que causan pérdidas de vida y daños en la infraestructura económica y el medio ambiente, y la prevención y/o la mitigación de esos peligros. En la asistencia a los países prestatarios afectados por desastres, se distinguen tres etapas: antes, durante y después del suceso.
ANTES DE UN DESASTRE, LA ASISTENCIA DEL BANCO SE CENTRA EN LO SIGUIENTE:
- La Preparación para el Desastre tiene como finalidad reducir el efecto de éste, estructurando de antemano la capacidad de los países de hacer frente a la emergencia de manera rápida y eficaz;
- La etapa de Prevención y/o Mitigación del Desastre incluye medidas para impedir que un fenómeno natural o un peligro en potencia afecte en forma perjudicial a las personas, la infraestructura económica o el medio ambiente.
Recientemente, el BID ha desarrollado un enfoque integrado con el fin de ayudar a los países a gestionar los riesgos de desastres naturales. El programa crea un fuerte incentivo para que los países inviertan en prevención y ofrece a los gobiernos una amplia gama de opciones financieras para superar la fase de emergencia de preparación y respuesta ante el acaecimiento del desastre.
DURANTE LA EMERGENCIA
La meta principal es la reducción al mínimo de las pérdidas de vida y bienes. Según el tipo de desastre y el estado de preparación, el Banco colaborará con el país solicitante en sus empeños por lograr objetivos prioritarios urgentes.
El Banco movilizará recursos para prestar al país solicitante asistencia oportuna en esferas de actividad tan urgentes como el despeje y la limpieza a fondo de la zona del desastre; la activación de los servicios ordinarios de emergencia; la atención a las necesidades esenciales de la población, que ésta normalmente obtiene por sí misma; y la toma de medidas relativas a la salud pública y el tratamiento médico. Al mismo tiempo, el Banco recogerá información sobre el desastre para prepararse para tomar otras medidas.
DESPUÉS DE LA EMERGENCIA
La etapa de rehabilitación tiene las finalidades siguientes:
- Reparar a la mayor brevedad posible los daños en la infraestructura de servicios;
- proporcionar servicios necesarios y seguridad a la población; y
- garantizar la normalización de las actividades económicas.
En la etapa de rehabilitación, basándose en las conclusiones y recomendaciones relativas a la evaluación de daños formuladas por el personal de la Representación, las misiones especiales y expertos calificados, el Banco asignará prioridades al financiamiento de sus actividades de rehabilitación.
La rehabilitación deberá garantizar la continuación de toda obra o proyecto en ejecución que no haya sufrido grandes daños, de modo de poder alcanzar las metas buscadas y promover el desarrollo económico y social del país prestatario, salvo en casos en que, desde un punto de vista económico, resulte más conveniente abandonarlos.