El Departamento de Investigación y economista jefe (RES) genera ideas innovadoras que respaldan la agenda de políticas estratégicas del Banco y de sus países miembro para lograr un desarrollo económico y social inclusivo y sostenible en América Latina y el Caribe. Para aumentar al máximo el impacto de su investigación, el BID realiza actividades que proveen información a los departamentos del Banco, los gobiernos, la comunidad académica y la opinión pública en la región.
El BID, a través del Departamento de Investigación, asesora a la administración en materia de asuntos económicos y de desarrollo, realiza investigaciones y análisis sobre tendencias macro y microeconómicas, y supervisa el desarrollo de las bases de datos cuantitativas y analíticas del BID. Cuenta con un equipo de investigadores con excelentes credenciales académicas, vasta experiencia en investigación y formulación de políticas, así como experiencia en diversas áreas.

- América Latina y el Caribe necesita implementar políticas macroeconómicas para reducir la inflación y mitigar los impactos de un contexto global adverso en 2023.
- Un escenario inicial prevé que la región crezca un 1% en 2023 después de un crecimiento mejor de lo esperado del 3,9% en 2022. Se prevé que el crecimiento será del 1,9% en 2024.
- Los países enfrentan un triple desafío social, fiscal y de crecimiento que limita su desarrollo y el de su población. Contarán con las herramientas para abordar este desafío si toman las decisiones políticas adecuadas.

- La deuda total en América Latina y el Caribe ha aumentado a 5,8 billones de dólares estadounidenses, o el 117 por ciento del PIB. La deuda pública se disparó durante la pandemia, y las empresas emitieron montos considerables para sobrevivir a la crisis.
- Si bien contraer deuda ayudó a la región a sobrellevar la pandemia, actualmente implica una carga importante para su economía. Si los países pretenden crecer y reducir la posibilidad de una crisis de deuda más profunda, deben reducir la deuda a niveles prudentes.
- Para alcanzar niveles prudentes de deuda, los responsables de políticas pueden centrarse en mejorar las instituciones fiscales, aplicar medidas de consolidación fiscal, mejorar la gestión de la deuda y prestar asistencia bien enfocada a las empresas privadas prometedoras.

- La migración plantea tanto retos como oportunidades para las ciudades: Los migrantes que llegan a las ciudades de América Latina y el Caribe pueden contribuir al crecimiento económico y al desarrollo aportando sus ideas, cultura, habilidades y mano de obra. Sin embargo, también pueden representar retos relacionados con la vivienda, el empleo de trabajadores poco cualificados y la presión sobre los servicios públicos.
- Los responsables políticos deben centrarse en maximizar los beneficios de la migración: Para aprovechar el potencial de la migración urbana, los responsables políticos deben dar prioridad a políticas que promuevan la contribución de los migrantes al crecimiento de la productividad local, mejoren la disponibilidad de vivienda y mitiguen los posibles efectos negativos, teniendo en cuenta al mismo tiempo el contexto y las necesidades específicas de las poblaciones migrantes y residentes.
- Repensar la migración urbana para un desarrollo económico local duradero: Aceptar la migración urbana e integrar eficazmente a los migrantes en la economía local puede reportar beneficios económicos a largo plazo para las ciudades, fomentando la innovación, la productividad y la competitividad. Esto no sólo beneficia a los migrantes, sino que también mejora el bienestar de los residentes locales, especialmente los que se encuentran en situaciones vulnerables, contribuyendo a la prosperidad de la comunidad en general.


